No good
Caminaba como zombie (como siempre) por una parte de Santiago que se me olvidó. Entonces recordé que pasé por ahi mismo hace un año, solo y sin plata, pensando lo feliz que era en ese momento. Miré mi recuerdo y le puse cara de "que ingenuo eras!". Luego segui caminando y me encontré en el Santa Lucía. Hacía frío, pero no esa tarde de febrero hace tantos años, cuando la miré y me di cuenta de que en ese momento iba a tomar una decisión irreversible que definiría el resto de mi vida. Miré ese recuerdo y le dije: "a veces es bueno no seguir lo más lógico...".
Me tiré del cerro (me dolió) y llegué a punta de trote a departamental con gran avenida. Miré el local de llamados donde tomé la decisión que no tuvo que ver con la otra, excepto que sí lo tenía, todo que ver. Miré ese recuerdo y le dije: "a veces sí es bueno seguir lo más lógico..."
En el paradero (ese grande, verde, que está frente al homecenter) tomé un avión a un pueblecito, uno silencioso y con estatuas feas. Me paré sobre una vereda rota en una esquina, luego miré hacia adelante y la vi arrastrando mi maleta con una felicidad que por la cresta que echo de menos. Me dio pena, por lo que no hice y lo que debí hacer.
Miré ese recuerdo y le dije: "hasta mañana".
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